Acústica

Cualquier sistema físico puede vibrar a causa de diferentes motivos como el rozamiento con el aire,  la rotación respecto a un eje o  un impacto. Esto genera una onda sonora que se propaga a través del aire y que puede ser molesta.

 

Prácticamente todos los productos dentro del sector de tratamiento de aire generan un cierto sonido o ruido. Por este motivo es importante saber gestionar este ruido en nuestra instalación, con el fin de conseguir un ambiente agradable. 

 

Para poder determinar el nivel sonoro de una instalación, son necesarios dos conceptos claves:

Se define como la diferencia entre la presión instantánea creada por la onda sonora en un cierto punto y la presión atmosférica estática. Este parámetro determina el volumen percibido por el oído humano en un cierto punto, y varía en función de la distancia a la fuente de ruido. El nivel de presión sonora se percibe diferente en función de la frecuencia, y se expresa en decibelios. Para calcular el nivel de presión sonora en función de la presión en un punto, se utiliza la siguiente fórmula:

 

 

Donde P₀ corresponde a la presión sonora de referencia de 20µPa y P₁ corresponde a la presión sonora en el punto en el que se desea calcular.

 

Una vez calculado el nivel de potencia sonora, se pondera en función de la frecuencia para ajustarse a la percepción del oído humano, dando lugar a los decibelios ponderados A, dB(A).

 

 

Frecuencia [Hz]	63	125	250	500	1.000	2.000	4.000
Ponderación A	-26,2	-16,1	-8,6	-3,2	0	+1,2	+1

 

Se define como la cantidad de energía sonora irradiada por la fuente de ruido por unidad de tempo, y viene determinada por la amplitud de la onda sonora. Esta energía crea una variación de la presión instantánea que da lugar a la presión sonora. El nivel de potencia sonora se expresa en decibelios. Para calcular el nivel de potencia sonora emitida por una fuente, se utiliza la siguiente fórmula:

 

 

 

El nivel de presión sonora esta directamente determinado por la potencia sonora de la fuente y la distancia a ella, de tal forma que disminuye a medida que se aleja de la fuente de ruido. La relación viene dada con la siguiente fórmula:

 

Donde Lw corresponde al nivel de potencia sonora de la fuente y r corresponde a distancia a la fuente.

 

 

Como se observa en la imagen, tenemos una fuente de ruido que emite una cierta potencia sonora L_w, que provoca una presión sonora L_p1 a una distancia D1 y una presión sonora L_p2 a una distancia D2. Estas presiones son las que dan la sensación de ruido a  través del oído humano. Como la presión sonora disminuye con la presión, a una distancia D1 tendremos una mayor sensación de ruido que a una distancia D2.  Por este motivo, es importante distingir entre potencia sonora y presión sonora.

 

 

 

Normalmente los ventiladores y extractores diseñados para una instalación, superan con creces los niveles acústicos recomendados para la salut i el confort de sus usuarios. Por este motivo se utiliza la atenuación acústica, que consiste en la reducción del nivel sonoro debido a absorciones y tranmisiones de las paredes. Air Handling & Climate cuenta con diversas soluciones de atenuación acústica, así como silenciadores y rejillas acústicas.

 

Soluciones Air Handling & Climate

A continuación se muestran las diferentes soluciones con las que cuenta Air Handling & Climate para una atenuación acústica correcta:

 

Solución	Modelo	Atenuación
Silenciador cilíndrico	SAR, SAC, SACO	Hasta 35 dB(A)
Silenciador rectangular	BTC, Alveo	Hasta 45 dB(A)
Rejilla acústica simple	RSA	Hasta 15 dB(A)
Rejilla acústica doble	RSA	Hasta 27 dB(A)

 

             Ó              Ó   

                                                     SAR                                                                 SACO / SAC                                                                   BTC                                                                      RSA